“Es necesario dar a los sueños el poder de los signos.”

FMH, Carta de los Principios Gianellinos

Los sueños del profesor, que se iniciaron en ese primer día en que comenzó su tarea de educar, sensiblemente fueron cambiando, según los signos de los tiempos.

Tiempos de fascinación; de espera; de madurez; de incertidumbre; tiempos de calma y de tempestades; tiempos de diseños y de proyectos.

Hoy los profesores estamos llamados a rediseñar nuestros propios proyectos, sin dejar de lado los sueños, esos, que la vocación no deja que se borren.

Seguir adelante a pesar de las dificultades, es propio de quien asume un proyecto para otros-nuestros estudiantes-, sin pensar en las propias limitaciones.

“Proyectar es el verbo de la misión, liberarnos de toda otra ocupación y compromiso, para estar preparados lo antes posible, no ya para ir, sino casi para volar, donde la necesidad llama; proyectar es el verbo de la audacia…A la hora de emprender las obras, hace falta la confianza en Dios; mirar hacia adelante, discernir y realizar dando forma a algo nuevo, conscientes que una obra se afronta con mayores probabilidades de éxito si se trabaja juntos, sea en la decisión o en la realización. Proyectar debe conjugarse al plural: busquemos, actuemos, persigamos lo que conocemos. La virtud unida es más fuerte. Una cuerda hecha de tres cabos difícilmente se rompe: más aún, cuando los cabos son muchos”.

            ¡Cuántos cabos se unieron para sostener nuestros proyectos!¡Cuántos favores recibimos de tantas manos tendidas! ¡Cuántas misiones silenciosas hemos realizado sólo por amor!

            En este día del profesor, celebremos la alegría de la misión generosa que compartimos, que supera la lógica del acompañamiento, que sólo responde a intereses propios y no orienta para llegar más lejos. 

Somos “como el águila que lleva a sus pequeños muy alto y los ejercita a contemplar fijamente el sol, hasta que los ve suficientemente fortalecidos como para sortear todos los vientos, para sobrepasar toda nube y superar toda tempestad”

            Que esta entrega vocacionada y misionera, que lleva a nuestros estudiantes cada vez más alto, sea bendecida y sostenida por María del Huerto, “mujer del cotidiano, siempre en camino…fuerza secreta...”

              ¡FELIZ DÍA DEL PROFESOR!