Alegrémonos porque el Señor está cerca de nosotros y viene a traernos la
salvación. La espera llega a su fin, por eso hoy encenderemos la cuarta y
última vela de nuestra corona. Que este símbolo nos recuerde la proximidad de
la venida del Señor Jesús. ¡Dios Hecho Niño viene a reconciliar los corazones y
estamos alegres! ¡Crece la esperanza!